pan blanco

pan blanco

Grain

Calificación del Artículo: 65/100

1 serving (100 grams) contains 279 calories, 9.8 grams of protein, 3.9 grams of fat, and 50.1 grams of carbohydrates.

Registra esta comida en SnapCalorie

★★★★★ 4.8/5.0 (más de 2,000 reseñas)
Obtén tu requerimiento calórico
Registra tu nutrición en segundos
Obtén un plan de nutrición personalizado
SnapCalorie App Screenshot
334.8
calorías
11.7
proteínas
60.1
carbohidratos
4.7
grasa

Información Nutricional

1 taza (120g)
Calorías
334.8
% Valor Diario*
Grasa Total 4.7 g 6%
Grasa Saturada 1.0 g 5%
Grasa Poliinsaturada 2.1 g
Colesterol 0 mg 0%
Sodio 592.8 mg 25%
Carbohidratos Totales 60.1 g 21%
Fibra Dietética 2.2 g 7%
Azúcares 8.7 g
proteínas 11.7 g 23%
Vitamina D 0 mcg 0%
Calcio 172.8 mg 13%
Hierro 4.1 mg 22%
Potasio 146.4 mg 3%

* Los Valores Diarios están basados en una dieta de 2,000 calorías. Tus valores diarios pueden ser mayores o menores dependiendo de tus necesidades calóricas.

Nutrition data sourced from USDA FoodData Central

Atributos de la Comida

Fuente de Calorías

73.0%
14.2%
12.8%
Grasa: 42 cal (12.8%)
Proteínas: 46 cal (14.2%)
Carbohidratos: 240 cal (73.0%)

About pan blanco

Suave y esponjoso, el bollo blanco es un pan versátil que se encuentra comúnmente en una variedad de cocinas, desde hamburguesas estadounidenses hasta bollos al vapor al estilo asiático. Normalmente elaborado con harina de trigo refinada, agua, levadura, azúcar y sal, su textura ligera y sabor neutro lo convierten en una opción popular para sándwiches, mini hamburguesas o como acompañamiento. Proveniente de diferentes tradiciones culinarias en todo el mundo, el bollo blanco suele asociarse con comidas informales o comfort food. Aunque su harina refinada proporciona carbohidratos de digestión rápida para obtener energía, carece de los nutrientes y fibra presentes en alternativas de granos enteros. A menudo bajo en grasa, su perfil nutricional puede variar dependiendo de ingredientes adicionales como azúcar o mantequilla. Para incorporarlo a una dieta equilibrada, disfrútalo con moderación y combínalo con rellenos ricos en nutrientes como proteínas magras y verduras frescas. Es un clásico imprescindible, pero se disfruta mejor con consideración.