Una rebanada de pastel esponjoso Victoria.

Una rebanada de pastel esponjoso Victoria.

Dessert

Calificación del Artículo: 40/100

1 serving (60 grams) contains 250 calories, 3.0 grams of protein, 10.0 grams of fat, and 35.0 grams of carbohydrates.

Registra esta comida en SnapCalorie

★★★★★ 4.8/5.0 (más de 2,000 reseñas)
Obtén tu requerimiento calórico
Registra tu nutrición en segundos
Obtén un plan de nutrición personalizado
SnapCalorie App Screenshot
1000.0
calorías
12
proteínas
140.0
carbohidratos
40.0
grasa

Información Nutricional

1 taza (240g)
Calorías
1000.0
% Valor Diario*
Grasa Total 40.0 g 51%
Grasa Saturada 20.0 g 100%
Grasa Poliinsaturada 0 g
Colesterol 160.0 mg 53%
Sodio 600 mg 26%
Carbohidratos Totales 140.0 g 50%
Fibra Dietética 4.0 g 14%
Azúcares 80.0 g
proteínas 12 g 24%
Vitamina D 0 mcg 0%
Calcio 80.0 mg 6%
Hierro 2.0 mg 11%
Potasio 200.0 mg 4%

* Los Valores Diarios están basados en una dieta de 2,000 calorías. Tus valores diarios pueden ser mayores o menores dependiendo de tus necesidades calóricas.

Atributos de la Comida

⚠️ Contains trans fat
🧈 High saturated fat

Fuente de Calorías

57.9%
5.0%
37.2%
Grasa: 360 cal (37.2%)
Proteínas: 48 cal (5.0%)
Carbohidratos: 560 cal (57.9%)

About Una rebanada de pastel esponjoso Victoria.

Una porción de Pastel Victoria es un delicioso postre de la cocina británica, reconocido por su simplicidad y elegancia. Tradicionalmente, este pastel consta de dos capas ligeras y esponjosas de bizcocho, elaboradas con harina, azúcar, mantequilla, huevos y un agente leudante como polvo de hornear. Los bizcochos se unen con una generosa capa de dulce mermelada de fresa y suave crema batida o crema de mantequilla. Aunque rico en sabor, una porción generalmente es alta en azúcar y grasas saturadas, lo que contribuye a su naturaleza indulgente. Los aspectos nutricionales incluyen pequeñas cantidades de proteínas provenientes de los huevos y calcio de la mantequilla y los ingredientes lácteos. Sin embargo, debido a su densidad calórica y su escasa fibra, es mejor disfrutarlo con moderación. Perfecto para celebraciones o la hora del té, esta porción representa el encanto clásico de la repostería inglesa, pero es más apreciada como un deleite ocasional en lugar de un alimento básico diario.