1 serving (30 grams) contains 120 calories, 7.0 grams of protein, 10.0 grams of fat, and 1.0 grams of carbohydrates.
Calorías |
960 | ||
|---|---|---|---|
% Valor Diario* |
|||
| Grasa Total | 80.0 g | 102% | |
| Grasa Saturada | 48 g | 240% | |
| Grasa Poliinsaturada | 0 g | ||
| Colesterol | 240 mg | 80% | |
| Sodio | 1600.0 mg | 69% | |
| Carbohidratos Totales | 8.0 g | 2% | |
| Fibra Dietética | 0 g | 0% | |
| Azúcares | 0 g | ||
| proteínas | 56.0 g | 112% | |
| Vitamina D | 48 mcg | 240% | |
| Calcio | 1600.0 mg | 123% | |
| Hierro | 0.8 mg | 4% | |
| Potasio | 160.0 mg | 3% | |
* Los Valores Diarios están basados en una dieta de 2,000 calorías. Tus valores diarios pueden ser mayores o menores dependiendo de tus necesidades calóricas.
El queso viejo, a menudo denominado queso añejo, es celebrado por su sabor intenso y textura desmenuzable, logrados a través de un proceso prolongado de maduración. Ejemplos comunes incluyen Parmesano, Gouda y Cheddar, originarios de las cocinas europeas, particularmente de las tradiciones italiana y holandesa. La maduración extendida permite que la humedad se evapore, concentrando las proteínas y grasas, lo que mejora la riqueza y desarrolla notas sabrosas complejas. El queso viejo es una fuente de calcio, proteínas y vitaminas esenciales como la B12, que apoyan la salud ósea y la función muscular. Sin embargo, su alto contenido de sodio y grasas saturadas deben consumirse con moderación, especialmente para aquellos que gestionan la salud cardiovascular. El proceso de maduración también reduce los niveles de lactosa, haciéndolo más fácil de digerir para las personas con intolerancia a la lactosa. El sabor audaz del queso viejo lo convierte en un ingrediente versátil, ideal para aplicaciones culinarias que van desde rallarlo sobre la pasta hasta servirlo en tablas de embutidos. Su perfil robusto sigue siendo un favorito gourmet en todo el mundo.