buñuelo francés

buñuelo francés

Dessert

Calificación del Artículo: 41/100

1 serving (57 grams) contains 220 calories, 3.0 grams of protein, 15.0 grams of fat, and 17.0 grams of carbohydrates.

Registra esta comida en SnapCalorie

★★★★★ 4.8/5.0 (más de 2,000 reseñas)
Obtén tu requerimiento calórico
Registra tu nutrición en segundos
Obtén un plan de nutrición personalizado
SnapCalorie App Screenshot
916.7
calorías
12.5
proteínas
70.8
carbohidratos
62.5
grasa

Información Nutricional

1 taza (237.5g)
Calorías
916.7
% Valor Diario*
Grasa Total 62.5 g 80%
Grasa Saturada 29.2 g 146%
Grasa Poliinsaturada 0 g
Colesterol 166.7 mg 55%
Sodio 708.3 mg 30%
Carbohidratos Totales 70.8 g 25%
Fibra Dietética 0 g 0%
Azúcares 33.3 g
proteínas 12.5 g 25%
Vitamina D 0 mcg 0%
Calcio 41.7 mg 3%
Hierro 2.1 mg 11%
Potasio 166.7 mg 3%

* Los Valores Diarios están basados en una dieta de 2,000 calorías. Tus valores diarios pueden ser mayores o menores dependiendo de tus necesidades calóricas.

Atributos de la Comida

⚠️ Contains trans fat
🧈 High saturated fat

Fuente de Calorías

31.6%
5.6%
62.8%
Grasa: 562 cal (62.8%)
Proteínas: 50 cal (5.6%)
Carbohidratos: 283 cal (31.6%)

About buñuelo francés

El French Cruller es una delicada masa a menudo disfrutada como un manjar de desayuno o postre, originaria de la cocina francesa. Renombrada por su textura aireada y forma de anillo dentado intrincado, está hecha de masa choux, una masa compuesta de harina, agua, mantequilla y huevos, lo que le confiere un bocado ligero y tierno. Tradicionalmente, una vez frito a la perfección dorada, se glasea con una capa dulce de azúcar que le aporta un toque satisfactorio de dulzura. Si bien su composición ofrece un modesto aporte de proteínas proveniente de los huevos, la masa es alta en carbohidratos refinados y azúcares, convirtiéndola en una opción indulgente que puede no alinearse con una alimentación consciente de la salud cotidiana. La preparación, a menudo implicando freír en aceite abundante, contribuye a su contenido calórico y niveles de grasa. Aunque no es un alimento centrado en la salud, el French Cruller sigue siendo una elección popular para disfrutar ocasionalmente, apreciado por su encantadora combinación de ligereza y dulzura que se combina perfectamente con café o té.