grasa de pato

grasa de pato

Cooking fat

Calificación del Artículo: 38/100

1 serving (14 grams) contains 126 calories, 0.0 grams of protein, 14.0 grams of fat, and 0.0 grams of carbohydrates.

Registra esta comida en SnapCalorie

★★★★★ 4.8/5.0 (más de 2,000 reseñas)
Obtén tu requerimiento calórico
Registra tu nutrición en segundos
Obtén un plan de nutrición personalizado
SnapCalorie App Screenshot
2172.4
calorías
0
proteínas
0
carbohidratos
241.4
grasa

Información Nutricional

1 taza (241.4g)
Calorías
2172.4
% Valor Diario*
Grasa Total 241.4 g 309%
Grasa Saturada 79.7 g 398%
Grasa Poliinsaturada 0 g
Colesterol 241.4 mg 80%
Sodio 0 mg 0%
Carbohidratos Totales 0 g 0%
Fibra Dietética 0 g 0%
Azúcares 0 g
proteínas 0 g 0%
Vitamina D 0 mcg 0%
Calcio 0 mg 0%
Hierro 0 mg 0%
Potasio 0 mg 0%

* Los Valores Diarios están basados en una dieta de 2,000 calorías. Tus valores diarios pueden ser mayores o menores dependiendo de tus necesidades calóricas.

Atributos de la Comida

🥓 Keto friendly
🍯 Low sugar
🧂 Low sodium
🧂 Low salt
🧈 High saturated fat
🍞 Low carbs

Fuente de Calorías

0.0%
0.0%
100.0%
Grasa: 2172 cal (100.0%)
Proteínas: 0 cal (0.0%)
Carbohidratos: 0 cal (0.0%)

About grasa de pato

La grasa de pato es un aceite culinario sabroso comúnmente utilizado en la cocina francesa y apreciado por su versatilidad. Proveniente de la carne y piel de pato, es rica en grasas monoinsaturadas, las cuales pueden favorecer la salud del corazón cuando se consumen con moderación. La grasa de pato no posee grasas trans y tiene un alto punto de humeo, lo que la hace ideal para freír, asar y saltear. A pesar de que aporta un sabor lujoso a los platos, es densa en calorías y debería utilizarse con moderación como parte de una dieta equilibrada. A diferencia de los aceites de origen vegetal, contiene colesterol y grasas saturadas, lo cual podría afectar la salud cardiovascular si se abusa de su consumo. Sin embargo, su perfil nutricional se considera superior al de muchas grasas animales, ofreciendo sabores sutiles y una textura suave. La grasa de pato sigue siendo un elemento básico en las recetas tradicionales, aportando profundidad a las papas, verduras y carnes asadas, mientras ofrece una alternativa gourmet a aceites como la mantequilla o manteca.