Sopa fría de remolacha con huevo y crema agria

Sopa fría de remolacha con huevo y crema agria

Appetizer

Calificación del Artículo: 72/100

1 serving (250 grams) contains 150 calories, 6.0 grams of protein, 8.0 grams of fat, and 15.0 grams of carbohydrates.

Registra esta comida en SnapCalorie

★★★★★ 4.8/5.0 (más de 2,000 reseñas)
Obtén tu requerimiento calórico
Registra tu nutrición en segundos
Obtén un plan de nutrición personalizado
SnapCalorie App Screenshot
141.5
calorías
5.7
proteínas
14.2
carbohidratos
7.5
grasa

Información Nutricional

1 taza (235.8g)
Calorías
141.5
% Valor Diario*
Grasa Total 7.5 g 9%
Grasa Saturada 2.8 g 14%
Grasa Poliinsaturada 0 g
Colesterol 47.2 mg 15%
Sodio 377.4 mg 16%
Carbohidratos Totales 14.2 g 5%
Fibra Dietética 2.8 g 10%
Azúcares 5.7 g
proteínas 5.7 g 11%
Vitamina D 18.9 mcg 94%
Calcio 75.5 mg 5%
Hierro 1.1 mg 6%
Potasio 283.0 mg 6%

* Los Valores Diarios están basados en una dieta de 2,000 calorías. Tus valores diarios pueden ser mayores o menores dependiendo de tus necesidades calóricas.

Atributos de la Comida

Fuente de Calorías

38.6%
15.5%
45.9%
Grasa: 67 cal (45.9%)
Proteínas: 22 cal (15.5%)
Carbohidratos: 56 cal (38.6%)

About Sopa fría de remolacha con huevo y crema agria

La Sopa Fría de Remolacha con Huevo y Crema Agria es un plato vibrante y refrescante originario de la cocina europea del este, particularmente popular en países como Lituania y Polonia. Esta sopa fría se prepara con remolachas terrosas, pepinos y a veces rábanos, creando su llamativo color rosa. Usualmente se sirve con un huevo duro y una cucharada de crema agria, que aportan riqueza y equilibrio a su sabor ácido. El eneldo y las cebollas verdes realzan su sabor fresco, mientras que el kéfir o el suero de leche proporcionan una base cremosa. Desde el punto de vista nutricional, esta sopa es una buena fuente de fibra, vitaminas y antioxidantes de las remolachas y verduras, promoviendo la salud cardíaca y la digestión. La proteína del huevo añade un elemento satisfactorio. Sin embargo, la crema agria y el kéfir aportan un contenido moderado de grasa, por lo que el tamaño de la porción es importante para aquellos que controlan la ingesta calórica. En general, este plato es una opción nutritiva y refrescante durante los meses más cálidos.