Cortezas de cerdo al horno

Cortezas de cerdo al horno

Snack

Calificación del Artículo: 48/100

1 serving (28 grams) contains 80 calories, 9.0 grams of protein, 4.5 grams of fat, and 0.0 grams of carbohydrates.

Registra esta comida en SnapCalorie

★★★★★ 4.8/5.0 (más de 2,000 reseñas)
Obtén tu requerimiento calórico
Registra tu nutrición en segundos
Obtén un plan de nutrición personalizado
SnapCalorie App Screenshot
320
calorías
36
proteínas
0
carbohidratos
18
grasa

Información Nutricional

1 taza (112g)
Calorías
320
% Valor Diario*
Grasa Total 18 g 23%
Grasa Saturada 6 g 30%
Grasa Poliinsaturada 0 g
Colesterol 80 mg 26%
Sodio 1080 mg 46%
Carbohidratos Totales 0 g 0%
Fibra Dietética 0 g 0%
Azúcares 0 g
proteínas 36 g 72%
Vitamina D 0 mcg 0%
Calcio 40 mg 3%
Hierro 2 mg 11%
Potasio 0 mg 0%

* Los Valores Diarios están basados en una dieta de 2,000 calorías. Tus valores diarios pueden ser mayores o menores dependiendo de tus necesidades calóricas.

Atributos de la Comida

🥓 Keto friendly
🍯 Low sugar
🧈 High saturated fat
🥩 High protein
🍞 Low carbs

Fuente de Calorías

0.0%
47.1%
52.9%
Grasa: 162 cal (52.9%)
Proteínas: 144 cal (47.1%)
Carbohidratos: 0 cal (0.0%)

About Cortezas de cerdo al horno

Las cortezas de cerdo horneadas son un aperitivo sabroso hecho con piel de cerdo que se limpia, sazona y se hornea hasta que quede crujiente. Originarias de cocinas tradicionales como la sureña americana y la latinoamericana, las cortezas de cerdo son una alternativa popular baja en carbohidratos a las papas fritas o galletas. No contienen carbohidratos, lo que las convierte en un aperitivo ideal para aquellos que siguen dietas keto o paleo. Ricas en proteínas y con algunos micronutrientes como colágeno, las cortezas de cerdo también son relativamente bajas en calorías en comparación con las versiones fritas, ya que hornearlas minimiza el uso de aceites añadidos. Sin embargo, pueden ser altas en sodio dependiendo de la preparación y el sazonado, lo que puede ser una preocupación para aquellos que vigilan su consumo de sal. Aunque carecen de fibra dietética y vitaminas, su textura crujiente y contenido proteico las convierten en una opción saciante para un capricho ocasional. La moderación es clave para incorporar cortezas de cerdo horneadas en una dieta equilibrada.